Última modificación: 2018-02-07
Resumen
En la primera obra conocida del clérigo y filósofo inglés John Wilkins (1614-1672) se percibe una tensión reductible a los extremos de razón e imaginación. La misma se adivina ya desde el título de esta obra de 1638, cuya primera parte (El descubrimiento de un Nuevo Mundo...), que sugiere lo aventurero, se ve contrapesada por una segunda parte de corte más “científico” y cauteloso (...o un Tratado tendiente a demostrar que es probable que haya otro Mundo Habitable en la Luna). El texto así designado se inscribe por ende en el terreno de la conjetura imaginativa pero racional, y procede a analizar las condiciones de posibilidad de la utopía que Francis Godwin (1562-1633) había propuesto en el relato fantasioso titulado The Man in the Moone: el viaje de un hombre a la luna y su encuentro allí con seres que llevan una existencia paradisíaca. A la luz de esta relación, el propósito de este trabajo es poner en evidencia la tensión antes indicada y considerar los mecanismos empleados por Wilkins como hombre renacentista completo (clérigo, filósofo y erudito) para encarar racionalmente un proyecto que contribuyó a definir la Modernidad, así como la compleja articulación de tal propósito con los dogmas de la fe, ese tercer elemento en discordia.