Dentro de la historiografía académica especializada en el análisis de la literatura utópica existe un amplísimo debate en torno a la definición de qué debe entenderse por utopía. Género literario, expresión de una mentalidad moderna, “espíritu”, visión global de la vida radicalmente opuesta a la realidad social existente, ideología opuesta al sistema dominante, viaje imaginario, antecedente romántico del socialismo, país imaginario descrito en una obra literaria ficticia, “modo” de sociedad ideal, comunidad imaginaria que restituye la complejidad de la vida social, construcción de un “no lugar” que permite el escape del mundo existente; estas, entre otras, constituyen algunas de las más destacadas acepciones atribuidas al término. En este contexto de debate, resulta llamativa la escasez de análisis específicos sobre la literatura utópica inglesa durante el siglo XVIII.

Este trabajo busca realizar un abordaje a este polémico género literario partiendo de dos textos poco trabajados por la historiografía del período, Idea of a Perfect Commonwealth (1752) de David Hume y An account of the Cessares (1764) de James Burgh. En principio, buscamos indagar en la dimensión pragmática de los textos (Skinner 2007), haciendo especial hincapié en los lenguajes políticos utilizados y en sus contextos específicos de producción. En segundo lugar, entendemos que estas utopías literarias se insertan en un debate mucho mayor sobre la búsqueda de la mejor forma de gobierno, y cuáles son los fundamentos morales, filosóficos y políticos que hacen posible la existencia de dicho gobierno. Así, esperamos poder plantear un posible abordaje de los textos utópicos ilustrados británicos, haciendo especial hincapié en la intencionalidad de los autores y en las posibilidades críticas y satíricas que brinda el género literario utópico.