Última modificación: 2018-01-27
Resumen
Walter Benjamin vivió en la capital rusa desde comienzos de febrero de 1926 hasta finales de enero de 1927. Durante ese período, escribió una bitácora publicada bajo el título de Diario de Moscú. Scholem sugiere varias razones que habrían motivado el viaje de Benjamin: su pasión por Asja Lacis y el deseo de medir más profundamente la situación rusa para elegir o escartar su posible ingreso al Partido Comunista de Alemania. En los textos “El narrador” (1936) y “Experiencia y pobreza” (1933) se encuentra la célebre tesis principal sobre la retracción de la facultad de transmitir experiencia. Moscú será experiencia en varios sentidos. En primer lugar, es el pre-texto de proyectos intelectuales posteriores e implicará también, para Walter Benjamin, la experimentación de una forma de organización posrevolucionaria. La catástrofe en la que Benjamin funda una visión de la modernidad y la sustracción de la experiencia es deudora de una visión mística cuyas raigambres se encuentran en el pensamiento cabalístico. El propósito de este trabajo es explorar las huellas mesiánicas en Diario de Moscú, tomando como apoyatura la lectura de Susan Buck-Morss (Dialéctica de la mirada. Walter Benjamin y el proyecto de los Pasajes, 1995) y Michael Lowy (Redención y utopía. El judaísmo libertario en la Europa Central. Un estudio de afinidad electiva, 1997).