Última modificación: 2018-02-11
Resumen
Este trabajo intenta reflexionar sobre algunos aportes teóricos que pueden favorecer la comprender el valor del método de trabajo conocido como trabajo de campo en los procesos de formación docente. Si bien el marco de referencia de partida es la experiencia de trabajo diseñada y desarrollada en la cátedra “Didáctica de Nivel Medio” del Departamento de Ciencias de la Educación de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires los conceptos planteados son válidos para instancias similares en las que el método pueda ser contemplado ya sea como espacio curricular autónomo o como parte de una estrategia de enseñanza de una asignatura del campo de las prácticas en trayectos de formación docente.
El trabajo de campo tiene por objetivos permitirles a los alumnos una primera inserción en la vida cotidiana de una institución educativa, poner en contacto los marcos teóricos propuestos en las asignaturas con la práctica profesional, adquirir competencias para trabajar autónomamente, para el trabajo en equipo y para la producción de un informe académico.
Esta propuesta de trabajo favorece tanto la integración de distintas modalidades metodológicas como diversas técnicas de trabajo. Siguiendo el trabajo de de Miguel Díaz se promueve la interacción de:
-clases teórico-prácticas en la que se pone en juego cómo se debe actuar;
-prácticas externas donde se pone énfasis en la observación y análisis de las -prácticas realizadas fuera de la institución;
-tutorías en las que se da cuenta de la atención personalizada, facilitando y orientando el trabajo individual y/o de cada grupo de estudiantes
-procesos de análisis y de escritura individual y/o grupal
-trabajo autónomo que desarrolla la capacidad de autoaprendizaje de los estudiantes y
-estudio y trabajo en grupo que implica el “hacer que aprendan entre ellos”, dando lugar a lo que Johnson y otros han denominado aprendizaje cooperativo.