Última modificación: 2018-11-27
Resumen
El propósito de este trabajo será analizar tres series de televisión anglosajonas emitidas recientemente: The bridge, The fall y The killing, a fin de pensar las tensiones que se construyen a partir de la figura femenina de detective. Una figura donde la diferencia entre roles femeninos y masculinos empieza a difuminarse (tanto en lo profesional como en lo sexual), donde las mujeres ocupan profesiones y espacios de poder que se pretendieron fuertemente masculinizados. Este es un proceso y un pasaje que se desarrolla en un escenario donde el conflicto no deja de estar presente. La violencia se presenta en su máxima forma a través de las víctimas de los crímenes, que en estos tres ejemplos siguen siendo mujeres: cuerpos inertes, despojos aniquilados por la sociedad, y que interpelan a esa mujer investigadora; representan lo que puede ser ella, lo que puede pasarle si sobrepasa el límite de los roles impuestos. Ya sea para formar parte de un retrato bello en el caso de The fall, cortado a la mitad para exponer una protesta de orden política en el caso de The bridge, o una excusa más de los medios para atraer la atención del público como en The killing, los cadáveres son cuerpos intervenidos, modificados y vejados por el criminal de turno, siempre inmerso en un sistema igual de podrido, corrompido y de retroalimentación mutua.