Esta ponencia explora la plausibilidad del uso del concepto de régimen emocional (Reddy, 2001) para analizar el proceso de desarrollo de un discurso nacional-desarrollista en la educación chilena durante algo más de medio siglo. Se considera que, a partir del paulatino acceso de los sectores medios (y, eventualmente, de los grupos populares) al poder político en Chile desde la década de 1920, es posible apreciar un giro en los objetivos estratégicos de conducción del Estado que tiene una expresión de contenido emancipador, sobre todo en términos de soberanía económica. Esta noción sufre tensiones extremas en términos de su propuesta económica y de integración nacional conforme se establece una revolución neoliberal a partir de la dictadura cívico-militar encabezada por Augusto Pinochet, lo que también se expresa en determinadas dimensiones emocionales en el ámbito escolar (Toro, 2015). Teniendo a la vista que la legitimación de ideas políticas comporta apelaciones al dominio emocional, como ha sido indicado, por ejemplo, por Nicole Eustace (2014) con respecto al patriotismo, se asume que el proceso legitimador del nacional-desarrollismo se manifestó, mediante apelaciones afectivas, en el mundo escolar. Así, en este texto interesa analizar tales aspectos emocionales de dicho discurso, que fue socializado a los estudiantes mediante distintos dispositivos formativos (normativas y campañas oficiales, currículo escolar, libros y textos de estudio).