Última modificación: 2018-02-11
Resumen
En el presente trabajo se analizará la construcción de la figura del narrador de La hora de la estrella, de Clarice Lispector (1977). La autora construye un narrador, un “intercesor” (Aguilar, 2001: 11), Rodrigo S. M., para abordar la historia de una joven nordestina, Macabea. Si bien desde el comienzo de la nouvelle este narrador se define a sí mismo como escritor, y como tal, se propone escribir la historia de Macabea, puede detectarse, a partir de ciertas marcas e indicios textuales, como Rodrigo S. M. se irá desplazando progresivamente de su figura de escritor para constituirse como un actor teatral. De esta manera, se observará cómo en la primera parte del texto, el narrador reflexiona sobre aspectos propios del campo teatral, como la corporalidad, la temporalidad de la acción teatral y la simplicidad del lenguaje relacionado con la simplicidad en las emociones. La sonoridad y materialidad de las palabras, así como el uso de elementos sonoros, también serán relevantes en la narración de Rodrigo, por lo cual, formarán parte de nuestro análisis.
Luego de abordar este preludio del narrador a la historia de Macabea, nos concentraremos en el relato propiamente dicho, para señalar aquellas marcas textuales que nos conducen a pensar la figura del narrador como actor e intérprete del personaje de la nordestina. En esta segunda parte del análisis, se relacionarán los elementos inesperados e imprevisibles que tiene la narración con la categoría teatral de improvisación, especialmente en la escena de la muerte. Para demostrar de qué manera el narrador se va configurando como actor, nos apoyaremos en las categorías teóricas sobre el campo de la actuación desarrolladas por tres grandes críticos y maestros del teatro: Constantin Stanivslki, Patrice Pavis y Peter Brook.