Última modificación: 2022-04-03
Resumen
A lo largo de varios trabajos de investigación enfocados en los posibles cruces entre el canon literario universal y las producciones culturales niponas, hemos trazado distintas clasificaciones del manganime destacando sus respectivas particularidades para generar herramientas que faciliten su abordaje (Rosain: 2017). En el último año hemos hallado una nueva categoría para comprender determinados comportamientos narrativos a la que hemos denominado “Dicotomías”. Semejante distinción obedece a que en las obras que engloba se presentarán personajes que se asumen a sí mismos como la reencarnación o materialización de otro ser, real o ficcional, que ha vuelto a la vida con un nuevo propósito, pero cuyo destino ya se encuentra preestablecido, debido a su accionar pasado. Así, estos personajes con conciencia de sí son y no son, al mismo tiempo, aquellas entidades previas. Sin dudas, una de las obras pioneras en este modo narrativo es Saint Seiya (Kurumada: 1986). Será nuestra intención, entonces, justificar tanto esta primacía como la existencia misma de la categoría en los elementos compositivos de esta obra. Dado que su argumento retoma teorías filosóficas del ámbito grecohelenístico entendemos que su fusión con ideas similares correspondientes al budismo y su consecuente adaptación semántica permitirán tanto una inserción adecuada en su lógica interna como la posibilidad de que se establezca a sí misma como un esquema narrativo básico del cual podrán beber no solo varios ejemplos contemporáneos (e.g. Ikkitousen) sino todas aquellas producciones que deseen intercalar en su seno elementos de fuentes ajenas a la vasta tradición historietística del archipiélago.