La obra de Luciano de Samosata (s. II d.C.) presenta diferentes posturas sobre el mito en un contexto dominado por el esplendor de la Segunda Sofística. Diferentes enfoques se han ocupado de esta etapa de la producción literaria, entre ellos existe un debate por la primacía de la oralidad o de la escritura. Precisamente la palabra mítica abre líneas de análisis vinculadas al tipo de fuente de su procedencia. Tal problemática puede leerse en Caronte o los observadores (Cont.) texto que presenta personajes mitológicos, Caronte y Hermes, como exploradores en busca del sentido de la existencia humana. La expedición los lleva a exponer una crítica sobre la insignificancia de las convenciones sociales por medio de versos homéricos (en forma de cita textual, pastiche o alusión), estrategia que introduce el campo semántico de la tradición oral. Sin embargo, en la pieza convive una reflexión acerca de la tradición libresca cuando se introduce la figura de Cloto que lee los hilos donde están escritos los destinos humanos. El propósito de este trabajo es poner de manifiesto la relación dialéctica entre oralidad y escritura habilitada por los temas míticos y su impacto en la reflexión sobre ambas instancias como fuentes de conocimiento. Se intentará mostrar la tensión de prácticas ejercidas en la época y cómo su reconstrucción permite producir sentidos literarios que reformulan posicionamientos tradicionalmente enfrentados.