Última modificación: 2018-11-27
Resumen
En esta ponencia presentaremos la experiencia de un trabajo de campo realizado por estudiantes de Ciencias de la Educación de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires durante el segundo cuatrimestre de 2016. El mismo tuvo por objetivo abordar la cuestión de las violencias en relación a las problemáticas de género y sexualidades en el ámbito universitario a partir del análisis del “Protocolo de acción institucional para la prevención e intervención ante situaciones de violencia o discriminación de género u orientación sexual”.
Dicho protocolo fue aprobado en el 2015 por el Consejo Superior de la UBA a partir de un proyecto presentado por la representación estudiantil de la Corriente Universitaria Julio Antonio Mella. Su implementación debía llevarse a cabo en los siguientes 180 días hábiles luego de su aprobación, sin embargo, esto no ocurrió en ninguna unidad académica de la Universidad. En este contexto, se conformó este grupo de trabajo con el propósito de llevar adelante una serie de acciones que contribuyeran a abordar las violencias en el ámbito universitario desde una perspectiva de género y derechos humanos, que entienda a la universidad como una institución que está inmersa en una sociedad que es machista, androcéntrica, cis-sexual y heteronormativa, en definitiva, patriarcal.
Abordaremos primero algunas dimensiones teóricas que nos permitieron pensar la cuestión de la violencia de género, el acoso, el abuso sexual y la discriminación por identidad de género u orientación sexual, teniendo en cuenta las especificidades de las instituciones universitarias y las relaciones de poder y género que se dan en ellas. Luego, nos referiremos a la experiencia misma del trabajo de campo y a las acciones que fueron llevadas adelante por el grupo: una encuesta-relevamiento que realizamos para obtener información sobre casos de violencia, acoso, abuso o discriminación por género en nuestra facultad; intervenciones que realizamos en la facultad con el objetivo de interpelar públicamente a la comunidad educativa en relación a la problemática de la violencia de género. Finalmente, presentaremos algunas reflexiones sobre el trabajo realizado cuya intención será la de hacer un balance y pensar cuáles son los desafíos que aún existen para avanzar en la implementación definitiva del Protocolo.