Última modificación: 2018-06-29
Resumen
La intención de este trabajo consiste en conjeturar, como paradigma posible para la enseñanza artística, la llamada “estética del error”. Tenemos en cuenta para este fin el marco teórico propuesto para la muestra realizada recientemente en Buenos Aires titulada La certeza del error, la cual consistió en una serie de producciones obtenidas a partir de la falibilidad tecnológica. En el texto curatorial Alejandro Schianchi contrapone, como rectora en el campo del arte, el concepto de la muestra a la idea de previsión. El mismo tendría afinidad, en el campo de la ciencia moderna, con la problematización de la noción de medición considerado desde una perspectiva experimental. En este aspecto, para nosotros, sería relevante la concepción nietzscheana acerca de la voluntad de poder, como tronco común para la ciencia y para el arte. Tomando este punto de partida proponemos trabajar sobre distintos modelos formativos para la enseñanza artística tal como lo propone Imanol Aguirre Arriaga. Analizamos un modelo logocéntrico postulado como el paradigma clásico de la enseñanza artística a partir del cual el discípulo tendría que lograr ciertos objetivos previstos a través de caminos establecidos. Como alternativa al descrito y abonando la estética del error, se podría pensar, conjuntamente con Aguirre, un modelo pragmatista fundado básicamente en las ideas deweyanas y en la noción de experiencia. Este último permitiría la valoración del equívoco como instancia productiva y creativa. Consecuentemente y tomando en consideración las ideas rancerianas pensamos como el primer modelo citado sería tributario del llamado orden explicador mientras que el segundo sería afín a la llamada emancipación intelectual. Habría en la revalorización del error una llave para considerar la igualdad de las inteligencias.
La posibilidad del error se dimensionaría, a nuestro entender, en el juego de las narraciones y traducciones por el cual el alumno podría producir su propio relato.