A través de la autorepresentación del cuerpo en la poesía por vía temática en imaginarios diferentes, o sea el surrealismo y la ritualidad en Alejandra Pizarnik, el existencialismo y los procesos alimenticios en Blanca Varela, ambas poetas crean una palabra poética material que se cristaliza en la página como proceso erótico-maternal de nacimiento. De esta manera el lenguaje poético se carga de pulsiones corporales en un proceso de materialización. Construyendo una comparación contrastiva se analiza en detalle la construcción de textos somáticos mediante una palabra semiótica en algunos poemas salientes y significativos en las obras de ambas poetas, para evidenciar la común búsqueda de una expresión poética que implica la corporalidad.