Tamaño de fuente: 

En la carne de René de Virgilio Piñera (1952), asistimos al proceso de configuración de la subjetividad del protagonista a partir de la mortificación de la carne, significante clave a lo largo de la novela que se impone sobre la dimensión de cuerpo. Esta oposición se resuelve precisamente en la medida en que la individualidad del cuerpo propio es disuelta en la comunidad de la carne y la subjetivación se alcanza paradójicamente mediante la asunción de la equivalencia entre uno y otro y entre sujeto y objeto. En tanto novela de aprendizaje, el protagonista es forzado a transitar un recorrido por diversas formas de violencia (manifestada no solo mediante la descripción de torturas, heridas y asesinatos sino también en el lenguaje mismo) que lo llevarán a aceptar su condición encarnada. Sin embargo, este término de cuño sartreano exhibe en la novela una clara articulación política, en la medida en que el proceso educativo se verá cumplido mediante el logro de una carne perfectamente apta para el servicio del dolor, una carne maleable, eficazmente torturable, esto es, manipulable.

cuerpo; subjetividad; violencia; política