Durante el breve pero intenso período conocido como la “primavera camporista”, la carrera de Letras –como la mayoría de las carreras de la rebautizada Universidad Nacional y Popular de Buenos Aires- experimentó una serie de transformaciones radicales en sus programas, sus prácticas y su plan de estudios. La intervención de Ottalagano en la UBA (septiembre a diciembre de 1974), que implicó el despido de una parte significativa de la planta docente, marca un primer hito en una reorientación de la Carrera que se profundizará en los años siguientes, y especialmente a partir del golpe de estado del 24 de marzo de 1976.

La presente ponencia se enmarca en la investigación colectiva llevada adelante por la Cátedra de Derechos Humanos, aprovechando las fuentes disponibles en el Centro de Documentación “Universidad y Dictadura” (FFyL-UBA). A partir del examen crítico de testimonios de quienes fueron estudiantes en ese período y de los programas de materias y cursos, proponemos aquí la reconstrucción de algunos elementos de la cotidianeidad de Letras durante aquellos años, con el fin de examinar las transformaciones en los programas, los objetos de estudio, el dictado de las clases, el perfil de los estudiantes y la relación de estos con los docentes y con sus pares. Estos desplazamientos conllevan una verdadera modificación de la Carrera, que –frente al modelo abierto y politizado  que se había propugnado durante el camporismo- queda desvinculada del contexto, despolitizada y convertida en un ámbito donde priman el autoritarismo en las clases y evaluaciones, la repetición acrítica como modelo de enseñanza-aprendizaje y la pasividad apática como rol asignado al estudiantado.