Este breve trabajo busca profundizar una pequeña parte de la historia de la Facultad de Filosofía y Letras, en particular la “nueva lectura del pasado” protagonizada por algunos colaboradores del Instituto de Investigaciones Históricas como Guillermo Furlong y de su inserción dentro de los círculos académicos y  universitarios.  Mi propósito es adoptar un enfoque que privilegia el análisis de este escenario dentro del proceso evolutivo de la vida cultural y política argentina sacudida por el ascenso social de los hijos de inmigrantes entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Este prestigioso Instituto desde sus orígenes (1921) se caracterizó, entre otras cosas, por un interés especial sobre la historia de la Compañía de Jesús. Desde sus comienzos una parte relevante de  su  producción se destinó a estudiar a los “letrados” argentinos dentro de los cuales los ignacianos fueron muchas veces protagonistas de la llamada intelligentsia. El lazo entre la Compañía de Jesús y el Instituto Ravignani se construye de manera sólida en los años en que la Iglesia Católica argentina está modelando su papel dentro de la sociedad rioplatense. En este contexto los ignacianos serán erigidos, por parte del dinámico frente del nacionalismo y de la militancia católica, en referentes de los primeros pasos de la “historia nacional”. A partir de esta conjunción se puede comprender las historias de vidas paralelas de algunos jesuitas argentinos, la sede romana de la Orden, y el Instituto Ravignani en los años 30.