El presente trabajo propone realizar una primera aproximación al problema del papel desempeñado por las artes visuales, fundamentalmente la pintura, entre los años 1880 y 1930, en relación a la construcción y reconocimiento de la identidad vasca en Argentina, así como a las diferentes prácticas que ciertos agentes vinculados a esta colectividad ejercieron sobre estos bienes simbólicos .El período sobre el cual se trabaja estuvo caracterizado por una inmigración masiva de vascos provenientes de los territorios tradicionales de EuskalHerria, tanto de las actuales comunidades autónomas vasca y navarra en España, como del País Vasco francés. El objetivo específico de este trabajo consiste en indagar el caso concreto de la donación realizada por miembros de la colectividad vasco-argentina al Museo Nacional de Bellas Artes de una obra adquirida en la exposición de los hermanos Valentín y Ramón de Zubiaurre en el Salón Witcomb en el año 1920, como un modo de producir “usos y significaciones diferenciadas” (Chartier 1990, p.43). Analizaremos el caso de esta donación en tanto una práctica de apropiación orientada “al reconocimiento de una identidad social, a la exhibición de un modo propio de ser en el mundo” (Ibidem, p 46) y para ello adoptaremos el concepto de representación propuesto por Louis Marin, que permite develar y articular “las diversas relaciones que los individuos o los grupos mantienen con el mundo social” (Chartier 1996, 85) y la tensión entre estas operaciones de construcción de sentido.