Última modificación: 2017-09-11
Resumen
Las personas Sordas no participan de lo común; los discursos y las prácticas cotidianas las han clasificado siempre dentro de la categoría “discapacitados” desconsiderando sus modos de ser propios y su decir; sus cuerpos han sido y son violentados desde la tecnología; sus espacios se han restringido a lo puramente comunitario; su participación política es prácticamente nula, y se ha ejercido sobre ellas y sobre su lengua una violencia simbólica, epistémica y física que raya en el genocidio debido a los intereses del mercado. Este trabajo presenta el caso de una comunidad minorizada poseedora de una lengua minorizada, y solo legitimada hoy en la Academia, que muestra no solo los alcances del poder, su absoluta falta de ética y sus estrategias de opresión, sino también la lucha del movimiento social Sordo por construir desde las sombras una identidad política en una lengua disidente. A pesar de que resulta imposible no estar en la cultura inmersos en un diálogo conflictivo, la Facultad de Filosofía y Letras asumió la responsabilidad de apoyar el área de la lingüística de la Lengua de Señas que Massone introduce en el país de la mano de lxs líderes Sordos y también como investigadora del CONICET. En el transcurso de esta ponencia relataremos no solo la historia del área en la Facultad, sino también los condicionamientos históricos que hicieron que esto fuera posible. Resulta importante además de destacar el hecho de que las lingüistas actuaron siempre como investigadoras orgánicas a la lucha de la comunidad Sorda argentina desde una postura etnográfica y hermenéutica.